La División de Investigaciones y Narcocriminalidad  con asiento en El Calafate incorporó recientemente una perra entrenada para la detección de estupefacientes.

De nombre Candy, esta pastor alemana línea sable nació en Pico Truncado, donde comenzó a prestar servicio para la DDI. Luego fue trasladada a San Julián y se terminó de capacitar en la Base Naval Puerto Belgrano.

Se trata del primer can con esta especialidad de la Policía de Santa Cruz, que presta servicio estable. Además es la única de la fuerza que logra certificación internacional.

Candy, de 3 años, ya protagonizó un operativo en un control de rutina, donde detectó una pequeña cantidad de marihuana que portaban dentro de un vehículo.

“Es de marcación pasiva, es decir que se acuesta al momento de detectar algún estupefaciente. Recientemente ya tuvo un resultado positivo. Estamos muy contentos por el trabajo”, destacó el comisario  Maximiliano Miño.

Fuente: AhoraCalafate