El regreso de Sporting al ámbito de la Asociación Bahiense de Bochas fue una inyección de vida para una disciplina que supo sobrevivir en nuestro medio por Ciudad Atlántida y luego Deportivo Punta Alta.

Los rojinegros adquirieron la concesión de Villa Mora, por espacio de 50 años, y no sólo se dispusieron a armas los equipos (Primera, Segunda, Tercera y Damas en las modalidades Individuales, Parejas y Tercetos) sino también a realizar importantes obras en la infraestructura (nivelación del terreno, iluminación y tablero electrónico).

El acondicionamiento del estadio ahora denominado “Manuel Titi Regueiro” sirvió para afrontar el 2019. Cuando todo estaba listo para una nueva temporada llegó la pandemia del COVID-19 y frenó todo tipo de aspiraciones.

Sin embargo, la subcomisión a cargo de Oscar "Lollo" Robañera y Alejandro Di Nunzio, con el apoyo permanente del presidente Néstor Hernández, no detuvo sus tareas y se dispuso a cumplir un sueño: decirle adiós al piso de tierra para darle lugar al sintético.

Tras demoler el antiguo rectángulo – de 23,70 por 3,70 metros de dimensión – se realizó una carpeta de cemento. Luego se procedió a realizar trabajos en el techo (lleva una tela aislante para evitar el goteo de la transpiración de las chapas). Y finalmente la colocación del linóleo.

La inversión ronda los 250 mil pesos y es fundamental para mejorar al jugador técnicamente, algo que en la región ya se implementó hace varios años. Desde la institución se mostraron muy agradecidos con todos los que han colaborado.