Representantes de la Juventud Radical visitaron ayer el comedor “Los Membrillitos” de Villa Arias y el merendero “Nudo a Nudo” de Punta Alta para entregar 300 útiles tras tres semanas de colecta.

Las donaciones recibidas fueron ordenadas y clasificadas por integrantes del espacio político. Se logró reunir lápices de colores, gomas, sacapuntas, repuestos de hojas, cuadernos, elementos de geometría, carpetas, tijeras, mochilas, cartucheras, libros escolares, biromes, lápices negros, marcadores y crayones, entre otros.

“Colaboraron con útiles nuevos y en buen estado vecinos rosaleños que se comunicaron a las líneas telefónicas difundidas por el partido a través de los distintos medios de comunicación, empresarios que se enteraron de la colecta y quisieron contribuir y miembros del comité radical local que siempre se suman a las iniciativas solidarias”, comentaron desde la JR.

La propuesta de la juventud surgió “luego de analizar la situación de pandemia y aumento de precios que conlleva a que, frente al inicio del ciclo lectivo, las familias vulnerables del distrito necesiten una ayuda para poder contar con los elementos necesarios para que los niños y las niñas puedan volver a clases”.

En este contexto, los jóvenes del radicalismo manifestaron que “es fundamental que desde la militancia, la solidaridad y empatía con la comunidad e instituciones, sean valores centrales”.