El dos veces intendente rosaleño Mariano Uset y actual director nacional de Articulación Territorial del Ministerio de Capital Humano, contó cómo vislumbra su futuro en la política.

“Vine a Buenos Aires por 3 meses y todavía estoy acá. O sea que no estoy planificando más allá del próximo mes”, dijo en declaraciones a Radio Mega.

Y agregó: “Capital Humano era un ministerio para estar un tiempo. Mi expectativa era participar de la transición del Gobierno que fue para lo que se me convocó”.

Vale recordar que tras el triunfo de La Libertad Avanza en la segunda vuelta de las elecciones generales de 2023, el desembarco de Patricia Bullrich en el gabinete del presidente Javier Milei provocó que otros referentes del PRO se incorporaran como funcionarios de la nueva gestión, entre ellos Mariano Uset.

“Cuando entré al HCD en 2013 (como concejal del Frente Renovador) y ni hablar cuando llegue a la intendencia, muchos decían que era un outsider, que no tenía experiencia política. Creo que el país necesita nuevos Marianos Usets”, sostuvo. 

Y siguió: “Un amigo me preguntó si no se vislumbraba un candidato a intendente para el 2027. Yo le respondí que en abril del 2013, a 8 meses de las elecciones legislativas, estaba en mi casa con la espalda rota porque me había caído de un techo y no se me ocurría que en 2 años iba a ser intendente. Tranquilamente hoy puede haber un tipo internado en el Hospital Naval saliendo de una crisis asmática o volviendo de un viaje y tal vez sea el intendente en 2027. Hoy hacer mucha especulación sobre eso no tiene sentido”.

“Hoy estoy disfrutando ser de nuevo un poco outsider. Los vecinos del barrio son los verdaderos jefes del tipo que hace política, los destinatarios de todo nuestro esfuerzo.  Necesitaba volver a ser ese vecino que ve la gestión política desde afuera para tener otra mirada y otro análisis. Porque cuando estas adentro se te empieza a cegar la mirada y empezás a perder la mirada estratégica”, comentó.

Uset no dejó pasar la oportunidad de colocar en vidriera la gestión del intendente Rodrigo Aristimuño: “Estoy disfrutando ser outsider y miro con mucha crítica y preocupación lo que está pasando en la ciudad. Primero por instinto animal porque transitamos casi un año y medio de una nueva gestión municipal y todavía se me sigue echando la culpa de cosas que no fueron, que no son, donde se me usa únicamente como una estrategia para sostener una propia incapacidad, una falta de voluntad, una falta de decisión para hacer lo que había que hacer”.

“En mi primer discurso de apertura de sesiones ordinarias del HCD presente más obras que las que hizo este Gobierno desde que asumió a esta fecha. No saben cómo, no quieren. Evidentemente tienen otros intereses, pero la cosa no está andando. Al principio me daba mucha impotencia por la culpa que me echaban a mí o al presidente Milei y porque no se hacían cargo de sus propias limitaciones”, resaltó.

Luego reconoció: “El 2024 lo pase muy mal. Hoy que el Tribunal de Cuentas aprobó todos mis ejercicios y ninguna de las miles de denuncias penales que me hacían han prosperado”.

“La gente también comenzó a entender que esto no era tan fácil. Al principio llegaba a Punta Alta y sentía que me miraban los bolsillos a ver si era cierto lo que decía el Intendente que me había llevado 500 palos (sic). Sentía que me miraban si andaba con plata encima. Yo estaba trabajando en Buenos Aires, muriéndome de calor en el verano viajando en subte y colectivo y mis vecinos, los destinatarios de todo mi amor, suponiendo que me había venido con una caja con la plata de las obras y había dejado sin la posibilidad de cobrar los sueldos a los empleados municipales”, contó Uset.

También admitió que “al principio tenía el instinto de salir a defenderme. Hoy la gente está viendo que nada de esto era, que ya pasó el tiempo de echarle la culpa a otro”.

“Si las calles están echa percha no es porque las deje así, es porque hay que mantenerlas todo el tiempo. Si las dejás de mantener se hacen percha. Yo paraba 6 meses de mantener las calles y era cuando la gente me reputeaba porque las calles se detonaban. Ahora hace un año y medio que no se mantienen las calles. Hace un año y medio que no se hace una calle de asfalto nueva. Han podido repavimentar algo, pero no le han dado la dignidad del asfalto a un solo vecino de Punta Alta”, acotó.

Y siguió con la crítica a la actual gestión municipal: “Todo lo que se podía volver para atrás, se volvió para atrás. Se redujeron especialidades en el Hospital, redujeron el acompañamiento de las obras en las escuelas”.

“Estoy en ese proceso donde el año 2024 fue muy duro sentirme objeto de todas las miradas.  Ahora siento un poco más el cariño de la gente y la reivindicación. Me permito ser ese observador desde la tribuna de como juegan en la cancha. Me parece que esa mirada me vuelve a marcar la distancia entre lo que está en la cabeza del político y lo que está en la cabeza de la gente. Esa distancia son las peleas internas o ponerse a la cabeza de problemas que no son los problemas de la agenda cotidiana del vecino”, sostuvo.

E insistió: “Hoy estoy disfrutando de poder encontrar cuales son esos enlaces (con la gente) para transmitírselo a los equipos que están jugando, sin bajada de línea. No mantengo el liderazgo de ningún espacio. Mucha gente que juega, me llama y me pregunta, pero no es que yo llamo y digo hay que hacer esto o lo otro”.

“¿En qué ando? Incierto”, puntualizó.